Debemos haber estudiado en nuestra época intermedia o en nuestra escuela que todo lo que se mueve tiene energía cinética, por lo que los científicos convirtieron esta idea en un elemento de cambio en nuestro entorno. Ingenieros de diferentes campos y científicos convierten esta energía eólica o, mejor dicho, energía cinética en electricidad y existe un proceso muy simple y fácil para hacerlo. Sólo hay una turbina en funcionamiento que realiza todo el procedimiento. La turbina es una gran herramienta de la maquinaria que canaliza la fuerza del viento para generar electricidad. Hay todo un proceso de generación de energía, el viento sopla sobre las palas de la turbina y ésta se fija a un rotor en movimiento y dándole un pequeño impulso. Luego, el rotor hace girar un gran generador para generar electricidad a un ritmo muy alto y todo este proceso se realiza en un día en el que el viento sopla más rápido de lo normal. Pero ahora todo está tan automatizado que no es necesario detectar manualmente la velocidad del viento. Hablando de las turbinas, existen dos tipos de turbinas, las turbinas eólicas de eje horizontal y las turbinas eólicas de eje vertical, ambas tienen funciones diferentes y conoceremos el funcionamiento de ambos ejes. Básicamente, los tipos de turbinas más comunes son las turbinas de eje horizontal. Por lo general, tienen dos o tres palas largas y delgadas que se parecen mucho a la hélice de un avión. La posición de las aspas se sitúa a favor del viento para que éste obtenga el máximo impulso y la velocidad se mantenga siempre de forma que se mueva muy rápido. La rotación por minuto es muy importante.
Las turbinas eólicas de eje vertical (VAWT) tienen palas curvas más anchas y disparadoras que se asemejan a los batidores utilizados en una batidora eléctrica debido a su forma curva, la potencia de resistencia es mayor y, por lo tanto, no es muy asequible para el bolsillo. Las turbinas eólicas son tan grandes que obviamente necesitan un área enorme para su instalación, por lo que a veces resulta muy costoso para el gobierno y también para la organización privada que se hace cargo del proyecto. Las turbinas eólicas individuales pueden generar 100 kilovatios de energía, suficiente para alimentar una casa. Las pequeñas turbinas eólicas también se utilizan en lugares como estaciones de bombeo de agua y con fines agrícolas porque necesitan una gran cantidad de electricidad y no están en condiciones de pagar altos impuestos. Por otro lado, turbinas eólicas más grandes montadas en torres que miden hasta 80 metros de altura y tienen palas de rotor que alcanzarán aproximadamente 40 metros de largo. Estas turbinas pueden generar 1,8 megavatios de energía que se estima que producirán 1 semana de electricidad en un hogar. Se pueden encontrar turbinas eólicas aún más grandes, encaramadas en torres de 240 metros de altura y con palas de rotor de más de 162 metros de largo, lo que también es una configuración enorme. Estas grandes turbinas pueden generar entre 4,8 y 9,5 megavatios de potencia y el impulso de los rotores también es muy alto. El material de estos rotores es muy liviano porque necesita moverse y cubrir largas distancias en longitud y anchura dimensionalmente.
La energía eólica es la fuente de energía más confiable. El medio ambiente no se altera y no contamina el medio ambiente. La energía generada a partir del viento es inagotable y reduce el uso de combustibles fósiles, que son el origen de los gases de efecto invernadero que provocan y aumentan el nivel del calentamiento global. Crea riqueza y empleo local. En el futuro vendrán muchos empleos y muchas familias podrán cubrir sus necesidades básicas.